lunes, 26 de diciembre de 2016

INTRO

Muchas veces somos torpes o muy vergonzosos para decir lo que sentimos, no tenemos valor de decir tal cual las cosas, nos da miedo preguntar. Da miedo que nos digan que no, asusta que digan que si ya que estamos tan acostumbrados a esa dolorosa y triste negativa que nos olvidamos de la posibilidad de algo bueno y positivo. Muchas veces da más miedo todo lo bueno ya que se acaba, ya que tiene fecha de caducidad. En cambio sabemos que lo malo nunca acaba, sigue ahí, esperándote y sin darte cuenta te acostumbras y vives con ello. Pues, eso me pasa a mi, la mejor forma que tengo de decir lo que siento, de expresar lo que pienso es escribiendo, ocultándome bajo un par de letras.